VELA CRUZ DE CARAVACA BLANCA
Esta vela presenta la forma de la célebre Cruz de Caravaca, símbolo de profunda tradición espiritual y esotérica, especialmente en España. El color blanco de la vela evoca la pureza, la limpieza energética y la protección luminosa. En su conjunto, la vela ofrece un instrumento ritual diseñado para crear luz en medio de la oscuridad, disipar energías negativas y proteger al entorno.
PARA QUÉ SIRVE
-
Protección frente a maleficios, energías densas o situaciones de bloqueo.
-
Limpieza espiritual del hogar, negocio o espacio personal, permitiendo que la luz del símbolo actúe como barrera.
-
Activación de buena fortuna, estabilidad y prosperidad mediante un enfoque ritualizado de fuerza espiritual.
RITUAL DE PROTECCIÓN CON LA VELA CRUZ DE CARAVACA BLANCA
-
Preparación del espacio
-
Escoge un lugar tranquilo, limpio y seguro donde colocar la vela.
-
Realiza una breve limpieza energética: puedes usar agua bendita, sahumerio o simplemente visualizar una luz blanca purificadora alrededor.
-
-
Colocación de la vela
-
Sitúa la vela sobre un soporte resistente al calor, preferiblemente con fondo blanco o claro para potenciar el simbolismo de la pureza.
-
Si deseas, puedes ungir la base o los laterales de la vela con unas gotas de aceite de protección o de limpieza energética.
-
-
Encendido e intención
-
Antes de encender, fija fuerte tu intención: por ejemplo “Que ningún mal-ojo, hechizo o energía oscura penetre este hogar/negocio. Que la luz de la Cruz de Caravaca me resguarde.”
-
Enciende la vela y mantén unos minutos de calma, observando la llama y permitiendo que tu mente se conecte con la idea de luz, escudo, resguardo.
-
-
Durante la combustión
-
Permite que la vela arda de forma continua si es posible. Si no puedes, al apagarse vuelve a encenderla manteniendo tu intención.
-
Puedes repetir internamente o en voz baja una oración de protección, por ejemplo:
“Cruz de Caravaca, ampara este lugar, cúbrelo de luz y expulsa toda sombra. Así sea.”
-
Si lo deseas, tras la vela puedes dejar una ofrenda simbólica (agua pura, sal, una moneda) en el espacio para reforzar el efecto.
-
-
Cierre del ritual
-
Una vez la vela se consuma (o tras un periodo que hayas decidido) apágala con respeto (ideal con apagavelas) y agradece:
“Gracias por tu resguardo y por tu luz. Que esta protección permanezca.”
-
Los restos de la vela pueden conservarse en un lugar limpio junto al altar, o enterrarse en un rincón de jardín o maceta como acto simbólico de integración de la energía.
-







Valoraciones
No hay valoraciones aún.