ACEITE OBATALÁ

ACEITE OBATALÁ

Propósito Esotérico Principal: Paz, Armonía Mental, Claridad de Pensamiento, Purificación y Justicia. Este aceite está consagrado al Orisha Obatalá, la deidad yoruba considerada el Padre de todos los Orishas, creador de la Tierra y de la humanidad. Obatalá rige la cabeza, los pensamientos y lo blanco.

El Aceite Obatalá se usa para invocar las cualidades de esta deidad: calma, sabiduría, misericordia y el equilibrio moral. Es fundamental para resolver problemas de índole mental, legal o moral.

Propiedades Clave de Paz y Pureza

1. Claridad Mental y Juicio: Ayuda a aclarar el pensamiento, disipar la confusión y tomar decisiones justas y sabias. Rige la cabeza del devoto.
2. Paz y Armonía: Es el aceite más poderoso para apaciguar situaciones de conflicto, disputas familiares o litigios. Atrae la calma y la serenidad al entorno y al espíritu.
3. Purificación del Aura: Se utiliza en limpiezas y purificaciones del aura, el hogar o el altar, ya que Obatalá es dueño de todo lo blanco y puro.
4. Justicia y Misericordia: Se invoca para pedir justicia en asuntos legales o personales, y para rogar por la misericordia y la buena conducta propia o ajena.

Modo de Uso Esotérico y Aplicación

• Ungimiento Personal (Cabeza): Aplicar una pequeña cantidad del aceite en la coronilla o en la frente (la parte regida por Obatalá) para invocar claridad de pensamiento, purificar las ideas y calmar los nervios.
• Ungimiento de Velas: Ungir velas de color Blanco (el color de Obatalá) en peticiones de paz, salud, armonía familiar y claridad mental.
• Limpieza de Altar: Se utiliza para ungir las herramientas de Obatalá o las ofrendas (como la manteca de cacao y la cascarilla) en su altar, manteniendo la pureza del espacio sagrado.
• Para Asuntos Legales: Ungir la documentación de asuntos legales o disputas, pidiendo a Obatalá que intervenga con justicia y misericordia.

ORACIÓN TRADICIONAL (Súplica a Obatalá)

«¡Baba Mí Obatalá! ¡Dueño de todas las cabezas y de la pureza de este mundo! Te saludo y te ruego por tu misericordia y tu gran paciencia. Permite que mi cabeza y mi corazón estén en paz. Dame la sabiduría y la serenidad para caminar por el camino de la verdad. Que tu luz blanca me cubra de todo mal, limpia mi camino de impurezas y dame [Decir la Petición]. ¡Jekúa Babá! (¡Te alabamos Padre!)»